The Prospector

La razón por la que destaca The Prospector es su complejidad. Todos sus elementos son reconocibles: el recuerdo a nuez del Amontillado, los tonos herbáceos del Benedictine y el Chartreuse, y las notas ácidas y de uva verde en el jerez y el verjus. Pienso que estos elementos equilibran la tortilla 'Hangtown Fry' de nuestro menú brunch, complementando sus sabores. Lo anuezado funciona bien con la papada ahumada de cerdo que utilizamos en sustitución del bacon, los tonos herbáceas fomentan el sabor de las ostras, lo ácido corta directamente la grasa del plato, y el carácter dulce del cocktail se equilibra con la amargura de los grelos. Ah, y el jerez y los huevos… ¡son una pareja perfecta!

Cuando tomarlo: Pero bajo ningún concepto este cocktail es sólo recomendable en desayunos o almuerzos; al ser una copa de menor grado alcohólico puede disfrutarse a cualquier hora, especialmente antes de la cena.
Con qué: The Prospector fue creado pensando en su facilidad para beber y su accesibilidad para prepararlo.  También me inspiré en la tortilla 'Hangtown Fry' que tenemos en nuestro menú brunch en en el Kinmont de Chicago. El brunch del domingo es toda una tradición aquí en Chicago, y a menudo se forman listas de espera a esta hora en los restaurantes… Llueva o haga sol, nieva o corra viento. Siempre es alentador, no pretencioso, se trata de comida y bebida; algo cuantioso, y algo brillante.