Salvador Espinosa Rodríguez

Me he criado desde pequeñito en la viña y relacionado con el mundo bodeguero desde 2014 cuando fui elegido como Presidente de la Cooperativa Vitivinícola Jerezana Ntra. Sra. de las Angustias. Con posterioridad en marzo de 2016 mi familia adquirió las Bodegas Díez-Mérito incorporándolas a nuestros viñedos y creando la nueva compañía Bodegas y Viñedos Díez-Mérito

He tenido la gran fortuna de convivir con el mundo del vino desde niño, recuerdo mi niñex en nuestra viña El Caribe merodeando contínuamente detrás de Manué, nuestro capataz. Siempre me ha apasionado este mundo. En la actualidad tengo la gran fortuna de dirigir una de las bodegas emblemáticas de Jerez donde se elaboran dos de las que podemos denominar joyas enológicas del marco de Jerez como nuestro amontillado Fino Imperial VORS o nuestro oloroso Victoria Regina VORS

En mi caso estoy muy orgulloso de todos ellos. Este año pasado hemos tenido importantes reconocimientos a nuestros vinos y entre ellos estoy especialmente orgulloso de nuestro amontillado Pemartin que se ha alzado con un Gran Bachus de Oro de los 12 otorgados así como de nuestro oloroso Victoria Regina que ha obtenido el trofeo al mejor oloroso en la International Wine Challenge.

Mi vino favorito es sin duda el amontillado. Dicen que es el vino que bebemos los jerezanos y a mi me gusta especialmente por su complejidad al combinar crianza biológica y crianza oxidativa.

Cualquiera de ellos ya que los vinos de Jerez son sin duda los vinos más versátiles del mundo para armonizar ciualquier tipo de comida llegando a acompañar a la perfección platos que ningun otro vino del mundo sería capaz de acompañar.

Un vino único que solo puede elaborarse en éste rincón de Andalucía en el que las combinaciones de nuestras tierras albarizas con nuestros vientos de levante y de poniente hacen que tengamos la suerte de poder elaborar un producto único en el mundo

Nuestra Bodega se encuentra en plena expansión comercial ya que se trata de una Bodega que hemos rescatado de un largo periodo de letargo y que nos está dando muchas alegrias y satisfacciones. El futuro del vino de Jerez pasa por la venta de productos de calidad que cada vez son más demandados por nuestros consumidores cada vez más curiosos e interesados en aprender y disfrutar de nuestros vinos.

Mis primeros recuerdos son de mi niñez en la vendimia y de ayudar a mi padre en una pequeña bodeguita que teniamos en casa con una solera viejísima de oloroso repasando y analizando los vinos, impregnándome de sus aromas y también de vez en cuando de sus sabores