El Tabanco de Sevilla

El Tabanco de Sevilla abre sus puertas en octubre de 2013, convirtiéndose en el primer y único tabanco de la ciudad y manteniendo la esencia de los tabancos jerezanos. Como señas de identidad: el vino y el flamenco. El primero está muy presente, con los mejores jereces y manzanillas servidos directamente desde la bota, mientras que el flamenco es una constante gracias a sus actuaciones en directo; no hay que olvidar que es la sede del Antiguo Café Silverio. Situado a escasos metros de la calle Tetuán y de la Plaza de la Magdalena, El Tabanco cuenta con un patio flanqueado por columnas y arcos que en su origen, allá por el siglo XVI, fue claustro interior de un convento de monjas, y que actualmente mantiene piezas de cerámica originales del siglo XIX.